Última estación

Todo comienza para la protagonista, una chica de 22 años, un lluvioso día abril de 1923. Tras perder uno de los dos trenes que paran en el pueblo remoto al que se desplazaba para una entrevista de trabajo, sin apenas dinero, se ve obligada a permanecer allí, asustada y mojada. Un trabajador de la estación la acompaña con su paraguas a la taberna, no sin antes comentarle en voz baja que abandone ese lugar lo antes posible.

Una novela de intriga que transcurre en la peor semana de la vida de Yolanda. Relata la peor experiencia de una mujer derivada de una entrevista de trabajo fraudulenta, desvelando los peores instintos humanos, la opresión y el miedo.