Los hijos de Crono

Galicia, 2038: en los abandonados astilleros de Vigo aparece un cadáver horriblemente mutilado. Con este macabro descubrimiento se inician dos investigaciones paralelas, llevadas a cabo por dos personajes diametralmente opuestos: Carlos y Elliot. El primero, sargento de policía, comprometido con su deber como representante de la ley; el segundo, ex camello, desengañado de la vida, que pasa su existencia alternando trabajos temporales con noches bebiendo y drogándose sin ninguna perspectiva de futuro.

La aparición del cadáver va a suponer, en pocos meses, un viraje existencial para los dos protagonistas: para Carlos, porque va a poner a prueba la fe en todo lo que cree; para Elliot porque va a suponer un despertar del sopor en el que lleva largo tiempo sumergido.

En Los hijos de Crono, el lector viajará con Carlos y Elliot por una Galicia distópica: conocerá la deprimida periferia viguesa, las comunas de la Ribeira Sacra, hackers, activistas… Luces y sombras de una sociedad tan distinta y tan parecida a la nuestra.