La víctima invisible

Irache Carrascal es una magistrada de treinta y siete años, madre de un pequeño de ocho, que verá cómo su vida acomodada sufre un giro dramático en cuestión de segundos. Tras su divorcio, se ha centrado en disfrutar de su tiempo de ocio junto a sus amigas, presumiendo de ello en las redes sociales en las que posee una alta popularidad que la aleja día tras día de su hijo Gabi. Este nuevo rumbo provoca que, de forma inconsciente, se mantenga ajena a los problemas del niño, hasta el punto que ignora la situación tan grave de acoso escolar que sufre por parte de un grupo de alumnos de su misma clase.

El estilo de vida de la magistrada, perturba el equilibrio emocional de una persona que padece una enfermedad mental por el hecho de no haber podido superar su obsesión de ser padre. El psicópata, movido por lo que considera una injusticia divina, decide ponerla a prueba para que demuestre que verdaderamente merece y quiere a su hijo, y que traspasaría cualquier límite por él. La gincana comienza con la desaparición de Gabi el último día del curso escolar.