Diario de un Dios. El último Testamento.

En el año 2100 la base de lanzamiento de Freedom (la antigua NASA) vibra de emoción ante el inminente lanzamiento del capitán Jack Brenner, doctor en medicina e ingeniería, con un amplio conocimiento de la psicología. Pero éste no será un antiguo lanzamiento al espacio, sino al pasado. La técnica de viajar en el tiempo es ya más que conocida y Jack debe llegar hasta el año cero con una misión muy precisa: que la humanidad no se extinga está en manos de Jack. Su objetivo será llevar esperanza y unión a los hombres para que en el futuro la especie pueda tener continuidad.

Provisto de técnicas de última generación, Jack aterriza en un paraje desierto en el año cero y allí comenzará su nueva andadura. Llevará palabras y actos de honradez y justicia. Y en sus actos le asistirán, de modo oculto, las tecnologías avanzadas de las que dispone. En el poblado conoce a una mujer de la que se enamora y la salva de la muerte operándola de un cáncer de útero. También la inseminará de modo artificial, ya que ella no puede tener hijos. En su nuevo mundo, se ha ganado el respeto y la admiración de sus vecinos con su honrado trabajo de carpintero.

Lejos de hipótesis más o menos supuestas, lo que sí queda claro y patente es la intencionalidad del autor: la religión como control de la mente del hombre. Un narrador que conoce los pensamientos de los personajes pero que no desvelará la sorpresa final, nos acompañará en una obra que por imaginativa y sorprendente, no dejará indiferente al lector.