¡César vive! (Conversaciones con César)

Un grupo de amigos, todos científicos, tienen una gran idea: Construir una máquina del tiempo. El objetivo: Viajar al pasado para poder cambiar los males sufridos a través de la historia y sobre todo los que padecemos en el presente.

Después de una discusión, deciden que el punto de la historia más importante para cumplir sus metas es el año 60 a. c., en Roma, para llegar antes de que a Julio César le nombren cónsul por primera vez, ya que la civilización romana es la cuna de la civilización actual.

Deciden viajar a Cádiz (Gades) para conocerlo antes del nombramiento, a casa de Balbo. Una vez preparado el viaje, así lo hacen y consiguen llegar a casa de este antes de que lo haga Julio César. A partir de aquí, siguiendo los pasos de la historia, se van sucediendo una serie de acontecimientos que nos llevarán al desenlace de la novela.

La novela respira historia, pues muchos acontecimientos que se narran son reales, sucedieron de verdad. Éstos se mezclan con la ficción de un viaje al pasado, donde el protagonista se va encontrando en situaciones que tiene que solventar. Se intenta poner remedio a muchos de los males que nos abruman en este momento, tratándolos de cerca y en origen.