La última conspiración

En un futuro en el que toda la información es controlada y gestionada por un único sistema global, un ordenador llamado Vimai, el robot más avanzado de la Tierra es destruido sin motivo aparente y los sistemas de transportes se colapsan de repente. Y  todo apunta a un fallo en Vimai.

Bill  Shepherd,  caracterizado  por  su  actitud  sarcástica  y  antisocial,  y  creador  de  Vimai, hará  lo  posible  por  descubrir  quién  está  detrás  de  los  extraños  acontecimientos  que,  sin  duda, forman parte de una conspiración para acabar con su mayor creación.

La última conspiración es una original novela de ciencia ficción en la que nada es lo que parece y cuyos inesperados giros sorprenderán al lector hasta las últimas páginas, además de ser una novedosa propuesta que reflexiona sobre la naturaleza humana y el posible riesgo que implica dejar al amparo de robots y procesadores el futuro de nuestra humanidad.

ENTREVISTA AL AUTOR

¿En qué te inspiraste para crear esta historia de robots, científicos y futuros inciertos?  

Supongo que me ayudó toda la ciencia ficción que vi de niño por televisión y la enorme cantidad que leí de adolescente, cogiendo un poco de aquí y de allá.

El libro que más influyó fue sin duda “Yo, robot”, de Isaac Asimov. Fue tras leerlo que escribí un relato que se acabaría convirtiendo en esta novela. Pero también tengo que mencionar “La guerra de los mundos” de HG Wells y “Crónicas marcianas” de Ray Bradbury. Puede que la influencia de estos dos sea más difícil de encontrar, más sutil, pero también hay mucho de ellos.

Si el lector pudiera sacar una conclusión o moraleja de “La última conspiración”, ¿cuál sería? ¿Hay mensaje tras el mundo ficticio de máquinas inteligentes que has creado?

La verdad es que cuando lo escribí estaba en una etapa de mi vida muy complicada, en la que tuve que pasar muchos días encamado, por lo que la literatura era la válvula de escape perfecta. Simplemente quería entretenerme escribiendo algo mío, algo que me gustase y con lo que emular los libros que tanto me habían gustado. No pensaba en sacarle moraleja o en lo que pudiese interesarle al lector. La escribí sólo para mí.

Pero a lo largo de estos seis años, pensando en ello, supongo que la moraleja es que el mundo nunca es lo que parece. Aunque tú veas una cosa, la realidad puede ser otra.

Y parece querer decírselo a los jóvenes de la edad que yo tenía cuando la escribí. Que a veces el mundo no es como nos parece y, aunque creamos saberlo todo, aún tenemos mucho que aprender de la vida.

Sobre las máquinas, sí pretendía hacer una reflexión sobre la “sujeción” a la que ya estamos sometidos. Si nos quedásemos ahora sin lo virtual, el mundo sería un caos. Y a veces da miedo pensar en nuestra pérdida de valores y de humanidad por apegarnos más a ellas que a las personas.

Y da miedo pensar en lo que puede pasar en un futuro y en un futuro no muy lejano. Si al escribirla hubiese sabido cómo estaría ahora el mundo en cuanto a Internet, los móviles y las redes sociales seguro que me daría algo…

Desde muy joven demostraste tu gran interés por la escritura, ¿pero por qué te has decantado por un género como la ciencia ficción como preferente?

Desde crío siempre me ha gustado. Recuerdo que en familia siempre veíamos “Star Trek” o “V”. Y mi hermano y yo veíamos muchas series y películas de ciencia ficción. Supongo que fue más por influencia de la tele y de mis hermanos.

Pero el germen de todo fue sin duda el gran impacto que me causó haber leído “La guerra de los mundos” a los diez años. El horror y la fascinación que me causó se me quedaron guardados durante muchos años, hasta que empecé a escribir ciencia ficción.

Además, el fantástico me ha demostrado ser el vehículo perfecto para las historias que necesito contar.

¿A qué público va dirigida “La última conspiración”?

Es un libro para todos los públicos, sencillo y rápido de leer, escrito al estilo de las novelas pulp de mediados de siglo XX. No creo que tenga que dirigirlo a un público en particular, pero supongo que a los jóvenes les gustará especialmente.

Próximos proyectos literarios.

Ahora mismo estoy en un momento de fin de ciclo y principio de otro.

Acabo de publicar una novela Steampunk, “Ecos de Voces Lejanas”, que ha ganado un certamen literario con la editorial Seleer y ya estoy preparando su continuación.

Además, tengo varios proyectos en proceso de los que no puedo contar nada aún y muchos, demasiados, en mente.

Pero también tengo ganas de escribir un par de novelas más que me rondan el cerebro desde hace un tiempo y quizá recopilar algunos de mis mejores relatos en una antología.