Sola y cansada (nada es lo que parece)

Silvia vuelve a casa después de esparcir en un monte las cenizas de su marido, que acaba de morir a causa de una extraña y repentina enfermedad, y empieza a rememorar los mejores momentos vividos junto a él.

Su prima, amiga y confidente, Lourdes, no cree que la muerte de Gonzalo haya sido natural y está empeñada en que inicien ambas una investigación por su cuenta. Poco a poco, Silvia, que ha comenzado a recibir extraños anónimos, se va convenciendo de que su amiga puede tener razón, pero sus pesquisas les llevan a descubrir que quizás Gonzalo tenía una doble vida que ella desconocía. La investigación obliga a ambas a adentrarse en un mundo sórdido y desconocido para ellas, teniendo que relacionarse  con extraños personajes que buscan sexo en locales de intercambio de parejas.

Las muertes se siguen sucediendo y terminan por entrar en escena el inspector Archilla y el subinspector Areses, que poco a poco van descubriendo que se encuentran ante un asunto peligroso y de difícil resolución…

El amor, el humor y el desamor junto a la traición, el engaño, el misterio y el sexo, se mezclan con el pasado y el presente en un caso en el que nada es lo que parece.